28 de febrero de 2009

Cruzar El Rio


Nuevamente comenzó un nuevo año, 2009 y como siempre he dicho año nuevo vida nueva, desafíos y proyectos nuevos, este año comenzó audaz y sigue de esa manera, es increíble como la vida te pone los desafíos o los caminos que debes seguir, recuerdo que una vez leí en uno de esos textos que me entregaba mi querido profe de filosofía, donde me partía la cabeza tratando de entender que era exactamente lo que Sócrates o Aristóteles querían realmente decir con tantas palabras. Una que me marco, Y que desgraciadamente no me recuerdo quien fue el genio que la dijo, fue que éramos grandes marionetas de Dios, y me marco porque el solo hecho de saber que mi vida era manejada por otro movilizaba la perdida de mis instintos de libertad, pero ahora que la madures ha despejado mas la vista nublada de la adolescencia puedo entender con más claridad, al final existe un objetivo de vida, pero también tenemos que ir quemando etapas y creciendo espiritualmente, es como un juego de súper nintendo, donde había que pasar etapas para dar vuelta el juego, la diferencia que en la vida real no das vuelta tu juego si no todo lo contrario.
Y hablando de juego se fue el verano, los ricos días de sol en la piscina solo serán un buen recuerdo durante los futuros días de estrés, donde el despertador de la mañana anuncia que tendrás un día maniaco, del colegio a la consulta, de la consulta al gimnasio, del gimnasio a la casa y en la casa terminar la pega atrasada… uffff…. pero no tengo de que quejarme este verano fue increíble, me fui a Iquique a conocer a mis futuros suegros, después viaje al sur de chile, estuve en la mina el chiflón del diablo, me embarque en el Huáscar, me tire en parapentes, si me lance al cielo!!..., y fue una experiencia increíble, estaba asustada, pero lo logre, vencí el vértigo y lo recomiendo completamente.
Y ahora que me encuentro frente a mi computador haciendo un mini resumen, me doy cuenta que lo poco que lleva este año, me ha demostrado que este será un año de riesgos, donde el que no se arriesga no cruza el rio y por mi parte creo que ya estoy lista para llegar a la otra orilla...

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